Vuelta de semana santa - 5 días: Cuetzalan - Hueytamalco - Teziutlán

Pues salimos por Insurgentes Norte y nos topamos con un gran embotellamiento donde vimos la GS650 de Aarón que luego nos siguió un trecho, hasta que en la caseta nos saludamos y acordamos desayunar juntos en Xicotepec. Tomamos la de cuota hacia las pirámides y los paisajes empezaron a mejorar mucho. Verde y bonito, hasta que nos salimos y tomamos la libre para el último trecho hacia la presa Necaxa. Ahí empezó el calor, pero el desayuno en el H Mi Ranchito (N20 15.775 W97 57.781) estuvo excelente. Eso sí, siendo lunes no había las deliciosas conchas que preparan el fin de semana. Aarón se despidió y nunca supimos si seguiría hacia Nayarit o regresaba a Cuernavaca que era su disyuntiva. Nosotros visitamos los super jardines del H y luego nos fuimos a otro junto a la presa. Pasamos una noche calurosa y por la mañana salimos al sur hacia Chignahuapan. Los paisajes en esa ruta super verdes y espectaculares. Las carreteras desiertas. Desayunamos en El Caminero (N19 49.704 W98 01.900) y seguimos hacia Tetela de Ocampo. Esa ruta ya fue más árida, pero también bonita. Pasa por varios pueblos chicos donde paramos a tomar fotos. Tetela esta muy arreglado. Ahí pasamos la tarde tomando café helado, acompañando a las niñas que practicaban sus pasos de baile en la presidencia municipal, platicando con quienes se admiraban de la moto. Nos quedamos en el mejor hotel del lugar, nuevo y cómodo por $250 (Jaguar, N19 48.939 W97 48.773). Por la mañana salimos hacia Cuetzalan por la carretera de la sierra que cuando último fuimos estaba recién construida, pero ahora esta bastante derruida. Las carreteras se construyen aquí para durar 1 a 4 años aproximadamente. Sería extraño, salvo cuando se consideran las necesidades familiares del presidente municipal en turno. Hacía mucho calor, pero es una excelente carretera. Mejor para época de lluvias sin embargo, por los paisajes y cascadas. Paramos a comer un mole algo picoso y visitar la cascada en Apulco (N19 55.095 W97 36.491) donde hay unas excelentes regaderas de bamboo para mojarse vestido y así refrescarse un poco. En Cuetzalan caminamos ya de noche en sus callecitas y leímos otro rato una novela de Stig Larsson. Al otro día salimos hacia el nor-este rodeando hacia Hueytamalco. Mala carretera. Paisajes tropicales y un desayuno junto al río (N20 07.498 W97 27.667) donde antes ya nos habíamos quedado una noche en una cabaña ($400). Mejoró la carretera, pero donde verdaderamente cambiaron las cosas fue en el tramo entre Hueytamalco y Teziutlán: Las mejores curvas y superficie que se pueden imaginar. Diseñadas para la moto. Ahora que en Hueytamalco recomiendo alejarse de los policías: A diferencia de otros pueblos, ahí estaban buscando como sacar dinero. Tuvieron sin embargo que darse por vencidos. Sobre Teziutlán debimos informarnos mejor lo que visitar o ver. La pasamos caminando entre tiendas y tomando fotos de gente en la plaza. El resto del camino al otro día fue por autopista hacia Libres y luego la de Puebla, con dos paradas para leer y descansar y una comida a la entrada en un Vips, luego de tomar el último tramo de la libre desde Río Frío por ser bonito. Excelente paseo y como siempre, lo más cansado y peligroso entrar y salir de la ciudad, especialmente las olas de asfalto con las que puede uno volar en Zaragoza. Mejor tomar Ermita.